encuentros

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nos conocemos desde hace mucho tiempo
tu mi buena amiga, mi fiel compañera
como es que no te había visto
como es que no te hice caso desde la primera vez
que te acercaste a mi.
“

Antes pensaba: Somos muy diferentes, tan incompatibles. Además en ese tiempo mi compañero era Forte, tu peor enemigo. Recuerdo aquellas platicas en las que me eras indiferente, aquellos tiempos en los que te acercabas a mi y te daba la espalda.

¿Como pude estar tan ciega? ¿Como no me di cuenta antes de la traición de tu enemigo?
Siempre trataste de advertídmelo, pero yo de tonta no te escuché.

Con el alma herida y con sed de expresión, busqué otros amigos que no tuvieran nada que ver con Forte.
Pasó el tiempo y mi alma me reclamaba un amigo. Así que una vez sanada la herida, salí en busca de nuevas amistades.

Caminé por muchos barrios, y tuve buenos camaradas, pero aun no encontraba lo que buscaba; algo que saciara mi hambre y sed de expresión.

Cansada de buscar sin éxito, me detuve a calmar un poco la sed ocasionada por tantas cuadras de caminar sin descanso. Al instante, alguien se me acercó diciéndome: - Hola, yo soy Son, soy nuevo aquí. Te gustaría charlar un rato conmigo? y pues yo sin tener nada que perder, accedí a la invitación. De allí nació una gran amistad.

Como Son era nuevo y muy diferente para el pueblo, que cualquier cosa distinta la ve mal, tuve problemas con mis camaradas que decían: -¿Por qué te juntas con ese raro?,- Y tu amigo Forte?, por eso lo cambiaste?? - No te va a dejar nada bueno…Pero sus palabras de desaliento hacían que nuestra amistad creciera aun más.

Un día en el café al que íbamos todas las semanas Son y yo, apareciste tú, Lita. ¿Te acuerdas? Por no ser descortés te invité a nuestra mesa, te presenté a Son, y todos compartimos buenos momentos.

Mi mente ya no estaba cegada por Forté, así que te empecé a ver. A ver que no eras todo eso que Forte me había dijo de ti, y me di cuenta que podíamos llegar a ser buenos amigas.

Sabes, ya era feliz con Son, pero que bueno que volviste a buscarme, a darme otra oportunidad de conocerte.

Y desde ese día Lita, Son y yo caminamos juntos por el parque.

Lita, una de mis mejores amigas y no te reconocí. No me arrepiento de no haberte hecho caso antes, sino nunca hubiera conocido a Son. Pero si hecho de menos todos los momentos que perdimos juntas.

------------------------------------------------------------------------------------------------para que no echen tanto a volar su imaginación, les anexo una ayuda visual

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salu2